Cerebro Reptiliano

El cerebro reptiliano, también conocido como el "cerebro primitivo" o "reptiliano", es una de las partes más antiguas y básicas del cerebro humano. Este término se deriva de la idea de que esta región del cerebro tiene similitudes funcionales con el cerebro de los reptiles y otros animales primitivos. El cerebro reptiliano está compuesto principalmente por dos estructuras clave: el bulbo olfativo y el tronco encefálico.

El cerebro reptiliano es responsable de las funciones esenciales para la supervivencia, como la regulación de la frecuencia cardíaca, la respiración, la temperatura corporal y la respuesta de lucha o huida ante situaciones de amenaza. También juega un papel importante en el control de los instintos básicos, como el hambre, la sed y el apareamiento.

Además de sus funciones fisiológicas, el cerebro reptiliano influye en el comportamiento humano de varias maneras. Controla las respuestas emocionales más primitivas, como el miedo y la agresión, y desempeña un papel en la formación de hábitos y comportamientos rutinarios. También está involucrado en la toma de decisiones impulsivas y la evaluación rápida de situaciones, incluidas las compras y el consumo.

Es importante destacar que el cerebro reptiliano no opera de forma independiente en el cerebro humano, sino que está interconectado con otras regiones cerebrales, como el sistema límbico y la corteza cerebral, que son responsables de funciones cognitivas más complejas, como el pensamiento racional, la planificación y el procesamiento emocional avanzado.