Una evaluación heurística es un método de evaluación de la usabilidad de una interfaz de usuario que se realiza de manera sistemática y basada en principios establecidos, conocidos como heurísticas. Estas heurísticas son pautas generales que ayudan a identificar problemas comunes de usabilidad en un sistema interactivo.
El proceso de evaluación heurística generalmente involucra a un equipo de evaluadores expertos que examinan la interfaz de usuario en busca de posibles problemas de usabilidad. Cada evaluador aplica las heurísticas de forma independiente y luego se reúnen para discutir y compilar una lista de problemas identificados. Estos problemas pueden incluir desde problemas de diseño visual hasta dificultades en la navegación o la interacción con el sistema.
Las evaluaciones heurísticas son rápidas y relativamente económicas en comparación con otros métodos de evaluación de la usabilidad, como las pruebas de usuario. Sin embargo, es importante destacar que las evaluaciones heurísticas no reemplazan la necesidad de realizar pruebas de usuario, ya que estas últimas proporcionan información más detallada sobre cómo los usuarios reales interactúan con el sistema.
Para llevar a cabo una evaluación heurística efectiva, es importante seguir algunos pasos clave:
Una evaluación heurística es una técnica importante en el diseño de interfaces de usuario, ya que ayuda a identificar problemas de usabilidad de manera rápida y efectiva. Al combinar esta técnica con pruebas de usuario, los diseñadores pueden mejorar significativamente la experiencia del usuario y la eficacia de los sistemas interactivos.
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